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La Nota

La Nota 26/01/2003

26/01/2003

 

Sí, me gusta ir al cole. Nunca creí que diría esto. Hoy las clases han vuelto a la normalidad, los profesores han vuelto al ritmo de antes. Qué era bastante rápido, pero el de la semana pasada fue cardíaco. Mr. Yanagita me ha hecho salir a la pizarra, afortunadamente he sabido resolver los ejercicios, pero me he pasado toda la clase en la pizarra escribiendo. Sí, el buen hombre supiera, que me encanta escribir en la pizarra, se desmoralizaría mucho.

A medio día, me he pedido un bocata en la cafetería y he tirado la comida de Maru, lo sé, no se debe tirar la comida. He engullido el bocata, y me ido a la sala de informática. He escrito un correo a todos, explicándoles que se me ha jodido la conexión en casa, que solo podré conectarme en el cole. La comunicación hasta nueva orden será vía emails.

No me ha dado tiempo a más, las clases de la tarde han sido bastante divertidas. En cocina a Miyoko se le ha quemado el sofrito, y casi provoca un incendio, rollo coloso en llamas. La profesora Hirata ha sido muy ágil con en extintor. En caligrafía, pues con la mierda de castigo, he mejorado bastante, y ya no estoy con los negados. Ahora estoy con los “puede mejorar”. ¡Yuppi! En debate, me he dedicado a mover muchos los brazos y la cabeza, y decir NAIN NAIN NAIN .Diós estoy supercontenta ¿seré imbécil? Soy tan feliz cuando estoy en el cole. Realmente soy imbécil.      

Me ha recogido Hogai, también llevaba a Shoyo y Eichi, hoy Hogai ha hecho de taxista.

Resulta que no estoy sola en mi exilio, Eichi se ha portado mal en el cole, para que Maru le castigase y hacerme compañía. Shoyo ya estaba castigado, y creo que lo estará de por vida. Así que los 3 nos hemos pasado la tarde haciendo deberes y estudiando. Después hemos barrido, fregado y ordenado la segunda planta. Hemos cenado, Eichi se ha ido a dormir. Yo he practicado caligrafía con papá una hora, mientras Shoyo leía el libro de paparruchas orientales. Y después Shoyo hacía sus ejercicios de español mientras yo leía las paparruchas orientales. Y a dormir.

Así es como mis hermanitos han aprendido español, todas las noches hacen ejercicios de lengua y de comprensión lectora. La verdad, es que como después de cenar me iba al ordenador, y papá y Shoyo se iban a la biblioteca, no me había enterado. 

Me gustaría hacer algo por Shoyo, el pobre lleva tanto tiempo castigado. No sé, está noche pensaré en algo.

La Nota 25/01/2003

 

25/01/2003

Hoy me he levantado de buen humor, lo sé, soy gilipollas. Después de lo de ayer, como me puedo levantar de buen humor. Pues ayer a la noche estuve pensando. Desde que llegué a Japón hace más de 20 días, todo ha sido bueno. Excepto la nota y lo de ayer, toda ha ido genial. Si en vez de estar en Japón estuviera en Barcelona ¿cuántos pollos habría tenido con Susi? Al menos, uno diario. ¿Cuantas bofetadas me hubiera llevado? Pues como mínimo unas 7 u 8. ¿Cuantas veces me habría enfadado con mi hermana y nos habríamos insultado? Eso es incalculable, se escapan de los parámetros, jejeje. Es lo que tiene la confianza, que da asco.

Así, que mirándolo bien, es una suerte que esté con los Utada. Vale que estoy castigada dos meses de todo, pero mirémoslo bien. Me jodería más estar 2 meses sin salir con mis amigos en Barcelona, que dos meses sin salir con Valeria y Maria aquí en Tokio.

Y espero que por buena conducta se me acorte la pena, coño si a los asesinos les funciona ¿a mí porque no?.

Bueno, hoy ha sido el primer día del resto de mi vida. Jejeje

Por la mañana me he levantado, que aun era de noche. ¡Eso va contra algún convenio de la Haya!, he hecho la colada, he limpiado, el salón, el comedor, la biblioteca y dos lavabos (¡qué asco! Jamás había hecho eso, he estado a punto de potar). He desayunado (tortilla) y cereales con café. He hecho 3 horas de caligrafía, ¡3 horas!. He tendido la ropa, he ayudado a Maru en la cocina. He comido estofado (y tortilla). He hecho 3 horas de japonés y 1 hora picando el trabajo de Hiro. He merendado un sandwich y un té. He ayudado a Maru a organizar el trastero, he barrido la entrada. Hemos cenado (está vez no había tortilla), y me he estado una hora de píe leyendo un libro lleno de paparruchas orientales.

Y a la cama, Eichi aun está abajo viendo, la tele y yo estoy aquí en mi habitación. Se supone que debería acostarme, y pensar sobre mis actos. Pero no soy tan profunda. Y a las 10 no tengo sueño. Estoy reventada, pero no tengo sueño. Y a pesar de todo sigo con esa estúpida sonrisa en la cara. Porque todos están bien.


La Nota 24/01/2003

24/01/2003

Hoy ha sido un día complicado. Cuando me he levantado solo Maru y Shoyo estaban despiertos. ¿No sé de donde saca las energías Maru?. He desayunado unos cereales y café, y Shoyo lo mismo. Le he recordado a Maru, que hoy me quedaba a comer en el cole, 3 o 4 veces. Maru nos ha llevado en coche al cole, primero a Shoyo y después a mí. Es la primera vez que monto en coche con Maru, conduce muy bien, mejor que Hiro, mil veces.

Al cabo de media hora han aparecido Valeria, Mari, Joe y Jotaro. Jotaro es el primo de Valeria, y era la condición para que ella pudiera venir. Valeria es guapísima, y venía vestida como una modelo. Mari también es muy guapa, pero ella iba vestida más normalita, unos jeans y una cazadora de motorista negra. Me encanta la chupa de cuero de Mari, no me canso de repetírselo. Los chicos por su parte iban muy informales. Yo llevaba el uniforme de la escuela, al fin y al cabo, se supone que hoy era un sábado lectivo. Le he dicho que me he visto por inercia, y cuando me he querido dar cuenta, se me ha hecho muy tarde. No se lo han tragado, pero han dejado de preguntarme. Joe y su padre han venido enseguida, y nos hemos montada en una furgoneta de los estudios, que nos a llevado a casa de Joe.

La mañana ha sido genial, la piscina, la música, los cotilleos, la sala de juegos,...sus padres nos han dejado tranquilos, solo hemos vistos a los padres de Joe a la hora de la barbacoa. Estaba deliciosa. Bueno Valeria y Mari son argentinas, y podrían discrepar conmigo, pero a mi me ha sabido a gloria.

Después de comer, el padre de Joe, nos iba a llevar a ver como se rodaban un programa de tele en directo, pero cuando he cogido la mochila para irme he visto que en el mobil tenia 29 llamadas perdidas y 17 mensajes. Y ahí se acabado mi sábado de fiesta. Pero a mí que me quiten lo bailao, que decía la abuelita.

29 llamadas perdidas, 15 del telefono de papá, 13 del telefono de Chechu y una del telefono de Shoyo. Los mensajes eran todos de Shoyo. Bueno, escribo, los 2 primeros mensajes de Shoyo. Mensaje n1 a las 09:00 Estás muerta, mensaje n2: a las 10:00 La família te está buscando como loca ¿donde estás? Ves para el cole corriendo, ya! El resto de mensajes son por el estilo ¿donde diablos te metes?, están muy enfadados. Ven,... ¿eres idiota?

A las 4:30 llegué al cole, cuando Mr. Yanagita, me vio, enseguida corrió hacía mí. Me agarró del brazo y estiró de mí hasta secretaría. Iba murmurando algo, pero para mi que era en suahili, porque no le entendí nada, hablaba demasiado flojo y demasiado deprisa. Pero en esas circunstancias, ya te digo que no era la tabla periódica lo que iba relatando. Al cabo de 5 minutos, el director, el subdirector y mr. Yanagita (porque me parece a mí que ya no seré su alumna favorita)  entraban en tropel acompañados de Hiroani. Estube media hora sentada, imaginándome lo peor. Me imaginaba a Eichi muerto en el hospital, o papá muerto en un accidente de tráfico, o a Susi... Me asusté tanto, la última vez, que estuve en la secretaría de un colegio, y en la que me trataron igual fue, el día del accidente de Fran y mamá.

Al cabo de media hora apareció papá, nunca me he alegrado tanto de verlo enfadado, me tire a su cuello y creo que ha sido la primera vez que le he dado un beso. Por desgracia, estaba tan enfadado, que me apartó enseguida y entró en el despacho del director. Y otra hora más sentada allí, esperando el veredicto y la condena.

La verdad, es que cuando salieron del despacho salieron riendo, y estrechándose la mano, incluso quedaron para tomar unas cervezas algún día. La cara de papá volvía a ser la del apacible Daisuke de siempre. Solo me atreví a preguntar si estaban todos bien. Pero no hacía falta, al salir de la secretaría los ví todos allí. Y cuando digo todos es todos, hermanos, tíos, primos, los Glutamato,... Habían movilizado la familia al completo. Nunca he pasado tanta vergüenza. Los Utada al completo, incluso primos que aun no había conocido, incluso la novia fea de Hiro.

Bueno la familia decidió pasar la tarde en la feria que habían montado los del cole, para financiar el viaje de fin de trimestre, como si nada hubiera pasado. Por un momento pensé que me iba a librar, Chechu incluso me invitó a un helado. La calma que precede la tempestad, diría Susi con voz de ultratumba. A las 8, nos fuimos para casa. En el coche iba pensando, casí lo logras, casi logras cumplir el mes. Está claro, que aunque lo disimularan estaban muy cabreados.

Bueno, no alargo la agonía, que a mí si que se me va a alargar. Efectivamente estoy castigada. 2 meses sin tele, 2 meses sin postre, 2 meses sin teléfono, 2 meses sin mobil, 2 meses sin internet, 2 meses sin salir, 2 meses ayudando en las tareas de casa y 2 meses sin dojo. Y claro está 2 hostias, tenía razón Susi “no hay 2 sin 3”. Lo que he tenido está noche en casa, no se lo deseo ni al peor de mis enemigos, todos pero absolutamente todos, me ha chillado, me ha reñido y me han vuelto a chillar. Y cuando ya se han cansado de chillarme, me han castigado, sí cada uno ha puesto un castigo, incluso el mocoso. (agradezco a Eichi por lo del postre). Después han vuelto a chillarme, y que después digan que los españoles somos escandalosos tiene huevos, y después papá me ha dado dos hostias de aquellas que te hacen temblar las orejas, ¡coño! Aún me duele la cara, usa la misma técnica de Susi, con carrerilla. Y directa a la cama, sin cenar.

Y lo peor es que mañana es Domingo, desearía que mañana fuera Lunes.

La Nota 23/01/2003

23/01/2003

Ya llevo 20 días en Japón. Se han pasado volando. Hoy me han llamado todos desde el locutorio de debajo de casa de Ruben, he podido oir sus voces, me he puesto a llorar como una tonta. También ha llamado Laurita, sigue con la eczema, le he dicho que no se la toque, y que se refriegue la cara contra Luís a ver si se calla, y la deja de llamar mutante. Le he dicho a Laurita que le he comprado muchas sorpresas para cuando vuelva. Es mentira, solo le he comprado un megaestuche de colores y un minikimono, la mar de chulo. Tengo que comenzar a comprarle chorraditas, para cuando venga. Luís me ha dicho, que la casa está muy tranquila sin mí, que se aburre mucho. También me ha dicho que van alquilar mi habitación a un Erasmus holadés. Espero que esto último sea una broma. Luís y Shoyo se parecen un poco, Luís es mayor, y es muy centrado, pero ambos son de la broma y hacen muchas muecas.

Al fin viernes, creía que nunca diría esto aquí. Y he acabado las clases a las 12, al igual que si estuviera en Barcelona. Las clases de la mañana han sido insufribles, estoy deseando que llegué el Lunes y volvamos a la normalidad. Después de la última clase que era la de Inglés. He desaparecido, les he dicho a Valeria y a los demás que tenía unos compromisos. (que importancia que me doy).

Está tarde me la he pasado enterita en un Spa, me han dado masajes, me han dado friegas, me han limpiado todos los poros, me he dado unos baños termales, ha sido genial. Ha sido mi regalo por mis 20 días nipones. Jejeje. Diós, me he quedado tan relajada que casí se me olvida regresar al colegio. Afortunadamente puse la alarma al reloj, y me ha dado tiempo de regresar. Hoy me ha recogido Hiroani en su mierdacoche, lo llamo así, porque solo es de 2 plazas con un maletero minúsculo.  Tanto Tetsuzan como Hogai tiene buenos coches, y papá tiene uno familiar de 9 plazas. Así que el coche de Hiro comparado con los otros se ve ridículo. Papá se ha tenido que quedar en la Uni, reunido con los del departamento. Y aun no ha regresado. Así que nuestra charla ha quedado pendiente, espero que se le olvide. Por mi parte queda olvidada.

He llegado a casa y Eichi estaba llorando, me ha dado un susto, pensé que le había vuelto a subir la fiebre. Pero no, Maru le ha zurrado, porque ha insultado al tío Fuku. El pobre solo había venido, para ver como se encontraba y el crío casi le saca los ojos. Bueno, hay que entender al pobre Eichi, en estos días cada vez que ha visto a Fuku era para ponerle una inyección. Maru, le estaba riñendo y le ha escondido todos los videojuegos.

Fuku me ha tomado la tensión, sigo baja. Vale, que no he seguido muy a rajatabla sus indicaciones, pero he tomado más cafés de lo habitual para compensar. Le he dicho que no me pinchara, él se ha reído. Y me ha seguido la broma un rato. Parecía de muy buen humor. Keiko ha traído unos bombones de chocolate para merendar, y han volado. Además en vez de té hoy hemos tomado una coca-cola fresquita con hielo. Después de merendar Fuku y Keiko se han ido, Keiko mañana tiene clases y tenía que hacer los deberes aún. ¡Notitas de los cojones!

Shoyo se ha pasado toda la tarde en el dojo, Hiro vigilando a Eichi que hiciera los deberes, mientras él picaba un trabajo, o algo en el ordenador portátil. Hasta ahora no me he enterado que tenemos un portátil en casa. A ver si me lo puede llevar algún día a la habitación, así no tendría que ir a hurtadillas al despacho de Chechu.

Hoy hemos cenado solo Hiro, Eichi, Shoyo, Ai,, Maru y yo. Ni papá, ni Chechu ni Hogai han cenado en casa. Chechu y Hogai han regresado justo cuando me iba a acostar. Venían “contentos”. Ha sido rarísimo ver en ese estado a esos dos. Maru les ha metido en la cama, y me ha hecho un shhhhhhhhhh con el dedo, como los carteles de los hospitales.

Estoy muy nerviosa, mañana me la voy pasar todo el día remojada en casa de Joe. Me hubiera gustado invitar a Keiko, pero ella tiene clases.

La Nota 22/01/2003

22/01/2003

Eichi, se encuentra mucho mejor, hoy ya ha vuelto a hacer el marrano con el desayuno. Esta semana no irá al cole, así lo ha dicho Fuku. Pero Maru ya le ha dicho que mañana se tiene que poner al día con las cosas del cole. Estas madres. Bueno nos hemos dejado a Eichi jugando con la videoconsola y así es exactamente como nos lo hemos encontrado cuando hemos regresado del cole.

Las clases de esta mañana han sido inaguantables, estaba a punto de ponerme a chillar, ¿que pretenden dar la materia de todo el trimestre en una semana?. La sala de estudio estaba a petar a la hora de comer, afortunadamente, con la mierda de la semana cultural, a la tarde estaba casi vacía. Takeshi y Amane han aprovechado la hora del almuerzo para abordarme, desde el incidente de la nota que Amane me esquiva. Por lo visto, están preocupados porque aun no me he apuntado a ningún club. Les he preguntado si tenían club de siesta, pero no lo han entendido. Me han dicho que es importante apuntarse a un par o 3 de clubs. ¿Y de donde saco yo el tiempo?. Mira yo ya soy del Club super3, club nintendo y del club natación Montjuïc así que ya he cumplido. No estaba de humor, las clases de esta semana son asquerosas. Takeshi me ha dicho que el Sábado no hay clases (ya lo sabía), pero que todos los alumnos venían con sus familias a ver las paraditas. Le he preguntado si era obligatorio. Se ha reído, y ha dicho que no, pero que es la costumbre. Así los padres participan en las actividades de sus hijos. Papá y yo hacemos caligrafía juntos, creo que por esa parte ya estoy cumplida. Además ya he hecho planes para el sábado. Nos vamos a casa de Joe, tiene piscina climatizada, y su padre nos va a hacer una barbacoa.

Después de estudiar 2 horas en la sala de estudio, me ha entrado un dolor de cabeza enorme. Así que he ido, ha dar una vuelta, para despejarme. Y he ido al mismo parque que fui ayer, a ver si veía a Shoyo y sus amigos. Y ¡Bingo! Allí estaban, haciendo el animal en los columpios ¿qué opinaría papá de que fume Shoyo?. Me han entrado muchas ganas, de darle un susto, pero me he sabido aguantar. Y he vuelto a seguirles y espiarles. Es muy divertido. El trío lalalá están hechos unos gamberretes. Fuman, beben, hacen el burro por la calle, juegan en los recreativos. Y lo mejor Shoyo tiene novia. Y sé quien es, la conozco. Es la hermana de Kyo, ¿qué pequeño es el mundo, verdad? ¿Será ella, la chica por la que le castigaron? No lo creo, me parece que la hermana de Kyo, también va al cole. No lo sé, se lo preguntaré a Glutamato.

He vuelto al cole justo un minuto antes que llegara Hogai, hoy me ha recogido él. Cuando he llegado a casa, papá ya estaba allí, le ha comprado un montón de mangas a Eichi. Espero que me los deje leer, cuando haya acabado. Hiroani también estaba allí, estaba jugando a la consola con Eichi.

Papá nos ha mandado a hacer los deberes a Shoyo y a mí a la biblioteca. En el salón había demasiado ruido. Yo le he dicho que no tenía deberes, que hoy nos habían dado solo material para estudiar. Así que me ha puesto unos cuantos ejercicios de caligrafía, y me ha dicho que me pusiera a estudiar, que antes de cenar me preguntaría la lección. ¿Preguntarme la lección? Yo no soy Eichi, no tengo 9 años. Lo de preguntar la lección es para criaturas, no necesito a nadie para saber si me lo sé o si no me lo sé. Shoyo, la he hecho gracia, que me enfadara tanto por lo de preguntarme la lección. Me ha dicho que a veces aun le pregunta a Hiroani la lección. No me ha quedado más remedio que reírme, aunque estaba enfadada y no quería. No me imagino a Hiroani recitando un tema y papá diciendo “bién, bién, aquí tienes que repasar más”.

Efectivamente, antes de cenar me ha preguntado las 2 lecciones de literatura japonesa que hemos hecho hoy. Me las sabía, vale que he dudado con un par de nombres, pero es que tienen unos nombres tan raros. Me ha dicho que antes de dormir me los volviera a leer. He estado a punto de soltarle una bordería. Pero como dice Susi, después de un primer bofetón estate segura que vendrán un segundo y un tercero. Así que me he mordido la lengua. A Shoyo también le ha preguntado, pero él se lo sabía al dedillo, me ha dado miedo y todo.

Hemos cenado pizza, otra vez. Por mi encantada, acabo de descubrir otro plato preferido. Las pizzas de Maru. Pero Chechu y papá se han quejado. Dos días cenando lo mismo les parece un suplicio.

Esta noche cuando iba a conectarme al messenger, papá me ha pillado, eran las 2 de la mañana, y se supone que debía de estar durmiendo. Me ha dicho que mañana por la tarde hablaremos. A puesto el mismo tono de voz que Mamá, ha sido acojonante. Es como si el espíritu de mamá hubiera poseído a papá y hubiera hablado a través de él. Ha puesto incluso la misma mueca.

Bueno son las 2:30 más vale, que me vaya a dormir.

La Nota 21/01/2003

 

21/01/2003

La fiebre ha bajado, por fin. Fuku no se va a a llevar a Eichi al hospital. Pero le ha vuelto a pinchar. Eichi le ha soltado una muy gorda a Fuku, si llega a estar sano, Maru lo estampa contra la pared. Parece que todo ha pasado ya. Papá y Maru vuelven a estar de buen humor. Y Ai ha ido hoy a trabajar. Eichi dice que ha sido mi sopa. Pero todos sabemos que han sido los cuidados de Fuku y de Maru. Pero me ha gustado que lo dijera.

Las clases de hoy han sido muy agobiantes, no ha habido ni un ejercicio, todo explicaciones. Después de comer me he ido a la biblioteca, ha estudiar. Sí, yo sola, sin que nadie me lo diga ¿me estaré ajaponesando?. Por la tarde he ido a dar una vuelta, necesitaba despejarme un rato. He visto a Shoyo y a Kyo y a otro chico ¿Kogoru, quizás? Me he escondido, sé que Shoyo nunca me delataría, pero no sé, me ha resultado divertido, jugar a los detectives. Les he seguido, y he visto que Shoyo se ha pasado la tarde fumando y haciendo el cafre con sus amigos. Qué envidia, si yo estuviera en barna, ahora mismo estaría haciendo lo mismo con mis amigos. Los echo tanto de menos, ellos se tienen los unos a los otros, pero yo estoy aquí en Tokio sola. Me he puesto a llorar como una gilipollas. He llamado a Susi, se ha extrañado mucho, siempre es ella quien llama, solo quería hablar un rato con ella y laurita. Luís me ha dicho que Laurita es mutante, por lo visto le ha salido un eczema en la cara y está hecha un mapa. Luís siempre tan simpático. 

Me he ido al dojo, a ver a Glutamato, he estado entrenando un rato, pero no tenía muchas ganas, Glutamato me ha invitado a merendar pastelitos típicos japoneses, los hace su mujer. Mientras merendábamos han llegado Kyo y Shoyo, les he sonreído, yo sé lo que han hecho esta tarde en vez de ir a clase. Kyo se ha ido al dojo, mientras Glutamato estaba conmigo Kyo se encarga del dojo, es el negocio de la familia. Shoyo se ha ido a entrenar un rato, pero tampoco parecía tener muchas ganas, así que ha empezado a hacer los deberes en casa de Glutamato. Glutamato ha llamado a papá para preguntarle por Eichi y para decirle que él mismo nos llevaría a casa para cenar.

Cuando Shoyo llevaba ya un buen rato haciendo los deberes, me ha preguntado si mañana habría otra nota para cenar. Cuando quiere Shoyo también es muy “simpático”. Estaba a punto de decirle que ya los había hecho, cuando Glutamato, ha dicho “semana cultural”. ¿Cómo lo ha sabido?. No tengo ni idea, ¿lo sabrá papá?. Creo que no, porque Glutamato me ha guiñado el ojo. Shoyo a sonreido, y ha dicho “interesante, muy interesante” en español. Es la primera vez que escucho a Shoyo decir algo en español. Ha sido rarísimo ¿Eichi también sabrá español?.

Shoyo no ha dicho nada durante la cena, hoy hemos cenado pizza, es la cena favorita de Eichi, en su honor Maru ha hecho las típicas pizzas niponas, están buenísimas, me he puesto como el quico.

La Nota 20/01/2003

 

20/01/2003

A Eichi no le baja la fiebre y Fukusabaru le ha vuelto a pinchar tres veces hoy. Maru está muy preocupada. Hoy hemos preparado el desayuno Ai y yo. Cada vez que Eichi ve a Fukusabaru se hecha a temblar y a gritar. Si mañana no le ha bajado la fiebre Fuku se lo va a llevar al hospital. Estoy muy preocupada por Eichi. Le he pedido la receta de la sopa de mamá a Susi, esta noche se la prepararé.

Las clases de la mañana se han vuelto más difíciles, quizás porque esta semana no hay deberes. No puedes, desconcentrarte ni un segundo. Están dando mucha materia. En química, física, biología y mates no tengo muchos problemas, enseguida lo entiendo. Pero en lengua japonesa y lengua y literatura inglesa me he perdido. Creo que voy a pedirle a Valeria que me ayude.

Me he enfadado con Hogai, el muy insensible se ha pasado por el cole de Eichi y le ha pedido a su maestra que le diera los deberes de esta semana de Eichi. El niño se está muriendo, y él en vez de preocuparse por su salud, va y le busca más trabajo. Pues no me lo he callado, y así se lo he soltado. Él me ha llamado entupida y yo a él cretino. Papá ha venido a poner orden, pero yo estaba muy enfadada con Hogai como para hacerle caso, así que me he marchado a dar una vuelta. Cuando he regresado Fukusabaru salía, le he preguntado por Eichi. Me ha dicho que parecía que estaba mejor, pero si la fiebre no bajaba esta noche, mañana lo ingresarían. 

Le he tenido que pedir perdón a Hogai, y delante de todos, él en cambio no me ha pedido perdón. Sé que Hogai también esta preocupado por Eichi, pero ... lo de los deberes ha sido muy insensible, de su parte.  Hoy no me apetece estudiar, me voy a dormir.

La Nota 19/01/2003

 

19/01/2003

Esta mañana el desayuno ha sido movidito, Eichi está malito el pobre, se ha pasado la noche vomitando y con fiebre. Fukusabaru ha dicho que era un virus, que tenía que reposar y tomar mucho líquido. Todos los médicos son iguales. Le ha puesto una inyección para bajar la fiebre, y Eichi a chillado, Pobre me sabe tan mal, es como cuando laurita cogió la varicela, pobreta mía. Chechu de camino a la escuela no me ha dado la brasa, ¿se le habrá pasado el cabreo?. A mí sí, ya le he perdonado. Soy un genio en química, bueno eso ya lo sabía, pero sigo siendo la mejor de clase aquí en Japón. El profe me ha felicitado delante de toda la clase, es vergonzoso cuando hacen esto, pero lo hacen constantemente. En inglés, no soy de las primeras, por supuesto, la mayoría de mis compañeros son angloparlantes, pero mi nivel es superior al de los japos. Valeria es un crack en esto de los idiomas. Habla 6, inglés, español, japonés, italiano, alemán y portugués. Da mucho miedo. Valeria es hija de japonesa y Argentino. Nació en Buenos Aires, pero ya lleva 5 años viviendo aquí. Sus padres trabajan en una multinacional japonesa.

Por la tarde, no ha HABIDO CLASES, hoy es la semana cultural, o algo así, los estudiantes montan paraditas con cosas y las venden, con el dinero se financia el viaje de fin de trimestre. Yo no me he apuntado a ningún grupo, por lo que he tenido la tarde libre, así que me he ido a dar una vuelta y estado haciendo el chorra un rato, después he regresado a la escuela. Esta semana no hay clases por la tarde ni deberes, no pienso decir nada en casa. Necesitaba un poco de descanso. Mañana me pasaré la tarde en la aula de informática, tengo que hablar con Olga.

Chechu me ha recogido del cole y me ha preguntado ¿qué tal? Vuelve a estar amable conmigo, ya se le debe haber pasado el enfado. Me ha comprado los palitos, son de color rosa, son muy cursis, pero bueno, son de adultos.

Al llegar a casa me he ido directa  a la habitación de Eichi, está malito, no le ha bajado la fiebre apenas, así que esta tarde Fukusabaru le ha vuelto a pinchar, le debe haber hecho mucho daño porque ha aullado como un animal herido. Me he pasado la tarde leyéndole mangas, él me corregía cada 2 por 3, pero al menos sonreía un poco. Papá me ha relevado a la hora de cenar, mientras nosotros cenábamos, él le ha dado la cena a Eichi. Papá quiere mucho a Eichi, supongo que ser padre a su edad hace que veas a los hijos más como nietos y los mimes más. En casa todos están preocupados por Eichi, así que a Shoyo y a mí nos han dejado bastante tranquilos. Hiro se ha pasado esta tarde para verlo y le ha traído un videojuego nuevo. Realmente Eichi tiene mucha suerte.

La Nota 18/01/2003

 

18/01/2003

He desayunado el típico desayuno japonés, Maru no me ha dejado salir de casa hasta que me lo he acabado. Eichi me ha dado su nabo y yo le he dado mi tortilla, hacemos un gran equipo. Y esta vez nadie, nos ha visto.

Después de desayunar a la hora de las gallinas, he acabado mis deberes, papá tampoco me ha dejado salir, hasta que los ha comprobado personalmente. Pero si no tiene ni idea de química, pero da igual, los ha comprobado igualmente. 

Al fin he conseguido salir de casa, lo he hecho corriendo, seguro que si me quedo 5 minutos más me pilla algún otro y me hace hacer alguna chorrada.

Hoy en el dojo he dado mi primera lección de defensa personal, Glutamato cree, que es mejor que aprenda primero defensa personal, no he querido ser maleducada, además me da las clases gratis. Pero yo, quiero aprender judo. Supongo que más adelante.

Kyo ha vuelto a acompañarme a casa, no hacía falta, no me iba a perder. Pero Glutamato ha insistido. Maru y papá han insistido que se quedara a comer, así que Kyo ha comido con nosotros, y se ha reído cuando me ha visto comer con palillos para niñas pequeñas. Le he sacado la lengua y le he llamado Burro. Todos se han reído, menos papá y Chechu. Chechu tenía unas ojeras increíbles. ¿donde fue ayer a la noche?. Después de comer, Shoyo le ha pedido permiso a papá para pasar la tarde en casa de GLUTAMATO. Papá ha accedido a regañadientes, pero Shoyo se lo merece, trabaja muchísimo.

Por la tarde ha venido a verme Keiko, hemos estado hablando en spanglish toda la tarde, hemos visto una peli de miedo y hemos comido palomitas de maíz. Ha sido genial. Keiko va al mismo instituto que Shoyo y que Kyo. Y me ha contado que la prueba esa que tenían les ha ido muy bien a los 3. ¿a los 3? Sí Shoyo se ajunta siempre con el trio lalala que diría mamá. Shoyo, Kyo y Kogoru. Por lo que dice Keiko, están hechos unos piezas. El trimestre pasado Shoyo y Kyo fueron expulsados de su anterio instituto. Es por eso que está castigado Shoyo. Por lo visto se metieron en una pelea o algo así, y incluso un chico fue al hospital.  Keiko lo explicaba horrorizada. No me imagino a Shoyo de matón de instituto, es demasiado simpático. Y kyo, bueno no he hablado demasiado con él, pero tampoco tiene pintas de matón.

Fukusabaru ha venido a buscar a Keiko después de cenar y de paso me ha tomado la presión. Fukusabaru es médico, es genial tener un médico en la familia. Estoy baja de tensión, le ha dado una dieta y unas gotas a Maru, para que me las tome. Fukusabaru es muy serio, se parece más a Chechu que a papá. Pero él al menos siempre me sonríe. No tengo sueño, y mañana hay cole. Voy a bajar a ver la tele a ver si me entra el sueño.

La Nota 17/01/2003

 

17/01/2003

sábado, sabadete,...

Las clases de la mañana han volado, y al salir me ido directa al dojo de Glutamato. A él no le importa que le llame Glutamato. Él me llama Himeko, como Shoyo. No te lo creerás, pero me he pasado 2 horas, practicando las caídas, comienzo a pensar que el judo solo consiste en caer. Kyo me ha acompañado hasta casa, hoy estaba más hablador, le debe haber ido bien en la prueba. Al llegar a casa, me he duchado en 5 minutos y me he vestido en 3. Estaba maquillándome cuando Valeria y Mari han llamado.  Hiro me ha acercado en coche hasta el centro comercial. Me he pasado toda la tarde probándome ropa, al principio estaba muy agobiada, pero he de reconocer que me lo he pasado muy bien. Me he comprado un montón de ropa. Diós papá se va a cabrear cuando vea el extracto de la tarjeta. Así que he comprado algo para cada uno, incluso para Chechu, para que no se enfaden tanto. Con Susi siempre funciona. 

He conocido la novia de Hiro, es fea a matar, realmente fea. Tiene los dientes salidos y los ojos hundidos. Hacen una pareja horrible. Hiro es guapísimo, y sale con ese adefesio, Megumi debe ser una fiera en la cama, porque sino no me lo explico. Este comentario, por supuesto que no se lo he hecho. Megumi, solo habla japonés. Así que hemos hablado muy poquito, y sobre temas de lo más banales. Se ve buena chica, nada más faltaba, imagínate fea y con mal carácter. Sería como Chechu, bueno Chechu no es feo, pero su mal carácter lo afea, más que Megumi.

Me he pasado toda la tarde en el ordenador, tenía que hablar con mis amigos, he podido hablar con todos. Ha sido genial. Fue Cristina, quien llamó a Susi, lo sabía. La he calmado, le he dicho que estaba haciendo judo y que ya era capaz de matar a un hombre con tan solo 2 movimientos. Jejejeje. Rubén ha comprado 6 pasages de avión para el 20 de julio, solo Olga y Cris le han pagado el suyo, los demás lo irán pagando a plazos. Y yo aun no he dicho nada a papá, no sé aun es muy pronto. Ahora estaba pensando, ni tan siquiera sé si yo estaré en Julio aquí, si las cosas continúan igual, no lo creo.

Hoy no se me ha escapado nada de los palillos, estaba muy contenta, Chechu me ha dicho que el Lunes me comprará unos palillos de adulto. Yupí! Ahora disfruto más de la comida, los dulces nipones no matan, pero la comida de diario está buenísima. Excepto la tortilla, que no me gusta ni en españa, ni en japón ni en Kuala Lumpur.

Después de la cena, papá nos ha obligado a hacer deberes hasta la hora de dormir, Chechu ha salido por ahí. Y Hiro y Megumi se han ido a una discoteca, creo. En casa nos hemos quedado solo Shoyo, Eichi y yo. Eichi se ha acostado enseguida, así que me he aburrido mortalmente. Shoyo, no parece muy contento, ¿la prueba le habrá ido mal?. No sé, me da miedo preguntarle, además papá no nos dejaba hablar.

Aun me quedan acabar los deberes de química y de Inglés, pero esos los acabo mañana en un momento.

La Nota 16/01/2003

16/01/2003

 

Susi ha vuelto a llamar, por lo visto Paty la ha llamado por lo del bofetón. Ha montado una buena, dice. Qué si estoy con una panda de cromañones, que son unos bestias, que mi vida están peligro. Esto último, lo dudo mucho que lo haya dicho, no sé, es más estilo de Cris lo de exagerar. Me ha “recomendado” que cuide las palabras que uso, no tan solo con los Utada sino también con los amigos. Que con la distancias se montan unas historias, que no te meneas, y que estaban a punto de llamar a la embajada, para que mandar a un escuadrón en mi rescate. Definitivamente, esa ha sido Cris.

También me ha dicho que ya ha comprado los billetes para Marzo, vendrán 10 días, ella, Luís y Laurita. Aun falta tanto para Marzo.

Hoy me he quedado dormida, así que solo he desayunado el café y la manzana, durante todo el trayecto al cole, Chechu ha venido dándome la brasa, comienza a ser una tónica. Me he puesto los cascos, y he desconectado, solo le he dicho que de buena mañana no. 

Hoy hemos conocido a Harry, es el mejor amigo de Joe, su padre es milico, eso no le ha sentado nada bien a Mari, ella odia a los milicos y a los polis. A mi tampoco me caen bien, pero nunca se lo hubiera dicho a la cara, ¿me estaré volviendo japonesa?. El pobre chico no tiene la culpa de tener el padre que tiene. Como a Valeria y a Maria, les gusta mucho esto de ir a centros comerciales, esta tarde después de clases hemos ido los 5 a uno, hemos entrado en una tienda de manga enorme, de 2 plantas. Parecía un niño pequeño en una tienda de chuches. Hemos hecho un montón de fotos. Y Joe me ha comprado un álbum, para ponerlas. A Valeria le ha regalado un bonito estuche y a maria la ha invitado a un helado. Ese chico se va a arruinar. Cuando volvíamos para casa, le comenté a maria, que como hoy ya habíamos ido de shoping, ¿el sábado que haríamos? Se ha reído durante todo el resto del trayecto, supongo que mañana ya me podrá decir ¿qué carajo era tan gracioso?

Al llegar a casa, me he tenido que ir al comedor a hacer mis deberes con Shoyo, Eichi ya había acabado los suyos y estaba jugando con un videojuego nuevo. Shoyo, tiene mañana una prueba o algo así, se le veía muy concentrado, a penas me ha hecho un par de muecas. Cuando he acabado de hacer los deberes me ido a tomar un baño, esta noche han venido a cenar los Glutamato.

Glutamato ha venido acompañado de su mujer y de sus hijos, su hijo se llama Kyo, y es el mejor amigo de SHOYO, él también parecía preocupado por la prueba de mañana. Glutamamto no ha parado de hacerme bromas, es muy simpático, y me ha dicho, que si quiero practicar judo, no hay problema, puedo ir a su dojo todos los días a cualquier hora. Eso es genial, le he pedido permiso a papá, no le ha hecho mucha gracia, pero le he puesto la carita de cachorrillo, y ha accedido. Cuando he acabado de cenar, quería quedarme a charlar con Glutamato, pero papá me ha mandado a la habitación a estudiar. Supongo que querían hablar de sus cosas. Pero yo tenía un montón de preguntas. Cuando me iba para la habitación he visto como Checho cogía por banda a Kyo, ¡le estaba riñendo! Chechu es un ogro, no tan solo conmigo sino con todo el mundo, no me extraña que aun esté soltero. Hoy no he podido conectarme, pero mañana sin falta me conecto, tengo que calmar a Cris, seguro que Susi se ha confundido.

La Nota 15/01/2003

15/01/2003

Por mis huevos, que me vengo. Estos nipones está claro que no conocen la furia española. Pero Chechu ahora irá con más cuidadito. Por que donde las dan las toman.

Las clases de la mañana muy bien, Joe y yo nos hemos hecho inseparables, pero no hay nada sexual, creo que a Joe le gusta Valeria, y que se acercó a mí, porque yo solo hablaba con Valeria y Mari.

Las de la tarde en cambio son una mierda pinchada en un palo. Excepto cocina, porque la profesora y yo hemos hecho muy buenas migas. Eso que crea que tengo un sentido de la orientación peor que el suyo, le ha encantado. En cambio en debate, es una mierda, hablan demasiado de prisa y gritando, parece una pescadería, ¿y estos son los niños ricos de Tokio?. Y caligrafía, bueno pues os acordáis el rollo que se monto con la notita, pues ya tengo otra a juego. Pero esta se la doy a papá y le pongo cara de pena y le suelto una lagrimita, a ver si cuela.

Hoy me ido a casa en el coche del padre de Joe, es muy simpático su padre, y nos ha invitado a merendar a una heladería. Ha llamado a papá a la Uni para pedirle permiso, para que no hubiese problemas. Después hemos ido a unos estudios donde se ruedan un par de programas de la tele, y ya por último me han llevado a caso. Mientras tanto Chechu estaba esperando en la puerta del colegio a que yo volviera. A las 8 ha llegado a casa Chechu, parecía preocupado, pero enseguida se le ha cambiado la cara de preocupación por la de ira. Y entonces me ha insultado, y yo le he abofeteado. No me ha llamado puta, ni zorra, ni nada por el estilo. Pero el insulto era los suficientemente fuerte como para merecerse la hostia. Que por supuesto ha sido mucho más fuerte que la que él me dio. Enseguida ha salido papá, para separarnos, y le ha dicho que el padre de Joe había llamado para pedir permiso. Y qué si hubiera llamado a casa o a mi teléfono móbil se lo hubiéramos dicho.

He aprovechado la coyuntura para darle la notita a papa, él en vez de enfadarse me la ha firmado, y nos hemos estado un par de horas juntos mientras me ayudaba con mis ejercicios de caligrafía.

Shoyo me acaba de decir que me he ganado un enemigo terrible, que a Chechu más vale tenerlo de tu lado, que no en contra. Ya que aunque el patriarca es papá, papá se pasa 4 meses cada año en España o en Sudamérica y que durante esos 4 meses quien manda es Chechu. Esto deberían decirlo antes, pero no me arrepiento, y que se prepare esos 4 meses, porque se las voy a hacer pasar putas. También me ha dicho que le ha encantado la hostia que le he metido, que envidia me tiene.

La Nota 14/01/2003

14/01/2003

Odio a Chechu, lo odio profundamente. Es un borde de cuidado, a Hogai ya se le ha pasado el enfado, pero a Chechu en vez de pasársele cada vez va a más. Hoy por ejemplo, después de recogerme del cole, se ha pasado toda la tarde encima de mi hombro diciendo “mal”, “muy mal”, “haz las cosas bien”. Y a Shoyo no sé si de rebote o por lo de ayer se ha llevado al menos 5 o 6 pescozones. Pobre Shoyo tiene que tener un dolor de cabeza. Ha llegado hasta tal punto de bordería que hasta Eichi ha recibido un bufido, afortunadamente, Maru, ha salido en defensa de su cachorro y de rebote de nosotros. Así que el resto de la tarde Tetsuzan se la ha pasado en su despacho. Y tanto Shoyo, Eichi como yo hemos respirado más tranquilos. Pero Como Shoyo está castigado no puede ver la tele, así que me he quedado a su lado haciéndole compañía. Y enviando mensajitos desde mi Telf. A sus amigos, él no puede tocar el Telf., pero yo si. Cuando ha llegado papá, le ha reñido por estar ganduleando, y le han mandado al despacho a estudiar. Y Eichi estaba con Maru ayudándola a preparar la cena. Así que, me he quedado sola en el salón, sin hacer nada, papá odia a los vagos, los odia mucho; a los vagos y a los ociosos. Así que cuando ve  a alguien, con los brazos cruzados sin hacer nada, pues estalla. Y claro Chechu ha aprovechado la situación, para vengarse de mí. Chechu ya tiene 30 años debería de estar por encima de esas cosas. Pero no, no lo está. Me ha preguntado a grito pelao, que si no estaba haciendo nada que le ayudara a pasar unas cosas al ordenador. A lo que yo tonta de mí, calentita como iba por toda la tarde que me había dado, le he dicho que estaba haciendo nada, y que tenía planeado hacer nada el resto de la noche, y que los datos se los pasara...y aquí he cometido el error. Siempre, siempre, me puede esta boca. Desde que llegué a Tokio, he cuidado mucho mi vocabulario, sé que ellos le dan mucha importancia al vocabulario, así que no se me había escapado ni un jopelines, ni cachis, ni truécanos. Y mucho menos, un joder, cojones, tuputamadre, que son tan recurridos en mi lenguaje diario. Bueno pues después de esto es fácil decir cual de estas lindezas le solté.

Así que señores y señoras, me he llevado el primer guantazo bien dado de Chechu, acompañado de un guantazo doble (de los de ida y vuelta)de mi señor padre. Y he tenido que pedir disculpas a Chechu y pasarle todos los puñeteros datos.

Papá ha llamado a Susi, y Susi se ha reído, decía que había hecho una apuesta con Luís, de cuánto tardaba en recibir una hostia nipona. Por cierto, ha ganado Luís, Susi dijo que al 2º día de llegar ya habría recibido la hostia nipona. También me ha reñido, por supuesto, ¿se iba a perder ella la oportunidad de chillarme?. Bueno el hecho es que como ya he dicho ha sido un día lamentable, y encima el subnormal de Chechu me ha dado un bofetón.

La Nota 13/01/2003

13/01/2003

Sé que debería contar como me ha ido hoy, pero el día ha sido tan nefasto, que mejor lo omito. Solo decirte que odio a Chechu y estoy segura que el sentimiento es mutuo.

Así que os contaré que hacen cada uno de los Utada un día de cada día.

Daisuke (papá) es profesor de literatura y lengua castellana en la facultad de Tokio.

Maru, ella es ama de casa. Pero antes era administrativa.

Ai : trabaja en un hotel, solo por las mañanas.

Tetsuzan y Hogai : son una especie de ejecutivos de una cadena hotelera y de restauración.

Hiroani : estudia empresariales en la facultad.

Shoyo : está en preparatoria, él va a otro instituto en que todas las clases se imparten en japonés. También va al dojo de glutamato.

Carla Ferrer (esa soy yo): estudiante en el instituto americano. No voy al dojo ni hago judo.

Eichi está en primaria, y es el único Utada que es un desastre con los estudios. Pero como es el chiquitín, se sale con la suya.

Kaneko la madre de mis hermanos mayores era la hija de unos señores que tenían muchos hoteles y al morir sus padres, kaneko y sus hermanos se hicieron cargo de los hoteles y los hicieron prosperar, hasta ampliar la línea a la restauración, Bueno al morir Kaneko, mis hermanos heredaron su parte en el negocio familiar y ahora trabajan en ellos.

Para rematar el día me ha puesto unos ejercicios en clase de caligrafía que son muy complicados, le he pedido ayuda a Shoyo, pero hoy le ha tocado recibir a él, así que estoy por llamar a Giro a ver si se puede pasar por casa, para ayudarme. Por cierto Shoyo hace los deberes en el salón porque también está castigado. El trimestre pasado, falto muchos días a clase porque se echó una novia que ya no estudiaba, y las horas de la tarde eran las únicas que podían quedar. Tengo que averiguar si aun sale con ella. Eichi es una Maruja de cuidado, tengo que tener en cuenta lo que digo delante de él.

La Nota 12/01/2003

11/01/2003

He hablado con papá, efectivamente se ha puesto serio y me ha hablado sobre la decepción, la responsabilidad, la madurez, bla, bla, bla. Esa charla ya me la conozco, mamá me la había dado un millón de veces. No sé mientras me daba la brasa, me sabía mal por el pobre hombre. Lleva toda la vida intentando traerme a Japón, y cuando al fin lo consigue, va y le salgo rana. Me temo que delante de él si que he llorado, delante de papá puedo llorar, sé que él no lo va a ver como una flaqueza. Él me ha abrazado, y me ha dicho que no vuelva a suceder, que él no dejara de ser mi padre por ninguna nota.

Muy bonito, muy enternecedor, pero él solo hace una semana que es mi padre, no creo que esas palabras pueda tomármelas muy en serio. Sé que me quiere, pero no es el mismo amor que siente por Tetsuzan, Hogai, Hiroani, Shoyo o Eichi.

Me siento fatal, le he fallado y en la primera semana, record mundial, pero mirémoslo por la parte positiva, ya no estoy castigada.

12/01/2003

Vale, las cosas han dado un vuelco de 180 grados. Tenemos a papá triste a Maru orgullosa de mí, a Chechu y Hogai cabreadísimos conmigo. Eichi me adora, soy su referente. Shoyo sigue siendo igual de payaso y Ai me mira con los mismos ojos que mira Susi a Laura cuando está se come una galleta antes de cenar. Y Hiroani, pues no lo sé, creo que aun no se ha formado una opinión sobre mí.

En el cole, pues genial, las clases muy bien, Joe y Valeria se han hecho amigos, por lo que a la hora de comer hemos hablado de música y cine, en vez de ropa. Por la tarde he hecho cocina, y me ha salido una tarta de queso alucinante. Y me he tenido que despedir de judo y de español. Si a partir de ahora haré debate y caligrafía. ¿Decisión de Chechu? No, decisión de Daisuke, que esta tarde se paso por el colegio para firmar la nota (ahora tendré que aprender a falsificarla, malos pensamientos alejaros) y para hablar con mis profesores. Y de paso para reajustar mis horarios. ¿Quizás 2 semanas sin hablar con Barcelona no era tan malo?

Bueno, supongo que tendré que esforzarme más, pero lo del judo me ha jodido un huevo. Ya sé que solo caía, pero supongo que algún día nos iban a enseñar a pelear ¿no?

A casa he vuelto en el coche de papá, es un coche familiar, así que se va más cómodo. Durante el trayecto me ha comentado sobre el reajuste de horarios y la charla con los profes. Todo ha sido muy cordial, ni gritos, ni bufidos, ni pescozones. Claro que el festival, me esperaba al llegar a casa. Cuando he llegado me he puesto a hacer los deberes en el salón, si en el salón, ahora tengo que hacer los deberes allí. Bueno espero que Eichi me deje los plastidecors. Shoyo también hace los deberes allí así, que no es tan grave. Y cuando he acabado me proponía irme al despacho de Chechu a hablar con Olga y explicarle todo lo que había pasado. Chechu aun estaba en el trabajo así que no había problemas. Pero cuando estaba en medio de la conversación, ha aparecido Hiroani (el guapo) y me ha dado un pescozón. Por los visto lo de mi castigo es vox populi en casa. Hiroani es muy guapo y tiene una voz muy sensual, pero me ha echado del despacho sin dejarme ni tan siquiera despedirme de Olga. Y tampoco me ha dejado ver la tele con Eichi. Hiroani durante la semana vive en la residencia de la universidad, solo está en casa los fines de semana. Así que hoy lunes, ni tan siquiera tenía que estar aquí.

Bueno la hora muerta que nos quedaba hasta cenar, nos la hemos pasado hablando, me ha preguntado cosas sobre España, pero sinceramente no tengo mucha locuacidad cuando me dan un pescozón.

Por lo visto Hiroani, me estaba haciendo un favor, con el humor que estaban Chechu y Hogai me hubieran pillado en el ordenador, allí se podía haber montado una gorda. A Chechu no le gusta que le contradigan, cuando él dice que se hace una cosa, se hace y punto. Para algo es el mayor. Y lo decía sin escapársele la risa, en serio. Y que cómo yo había ido a papá después de que él y Hogai me castigaran, no tan solo le había desobedecido sino que le había hecho quedar en muy mal lugar con papá.

Y visto lo visto en la cena, Giro tiene razón, papá parecía realmente enojado con Chechu y con Hogai, a los demás, incluida yo, nos trataban como siempre, muy cariñosamente. Pero con Chechu y Hogai era muy tosco.

Por lo visto ayer a la noche, después de bajar a hablar con papá, papá despertó a Chechu y Hogai y estuvieron discutiendo hasta llegada la mañana. Y tanto Chechu y Hogai se había ido al trabajo sin dormir, sin desayunar y con la bronca de aquí mi amigo, el pater familias. Bueno si yo tuviera su edad, también estaría cabreada. Pero ellos se lo han buscado, le conocen mejor que yo, y sabían que si ellos hacía de padres y le ocultaban mis cosas, se iba a cabrear.

Maru ha sido muy lista hoy ha hecho sopa y bolitas de pescado que se comen muy bien con palillos, así que en cuanto he acabado me ido para la habitación. No tengo ni pizca de sueño, pero paso de ir al salón, no al menos por unos días. Mañana me tocará ir al cole en el coche de Chechu, ojala me pusiera enferma.

La Nota 11/01/2003

 

11/01/2003

Takeshi y Amane han venido a recogerme a las 8, yo estaba frita, ayer me acosté a la 4:30 con los dichosos deberes. Y todo, por no recibir otra nota. Como han llegado que yo aun dormía, Maru les ha invitado a desayunar.  Cuando he bajado, ya estaban acabando, pero como comerse unos cereales con café, no lleva mucho tiempo, he acabado antes que ellos. No paraban de mirarme, no he caído que ni Takeshi ni Amane me había visto vestida normal, sin el uniforme.

El plan era ir al parque Komabano, y después de tiendas, que importancia le dan a ir de tiendas. Pero solo hemos ido a Komabano, Takeshi y Amane se sentían tan culpables, después de la metedura de pata que comimos en el parque y después me llevaron a casa. La verdad es que yo intenté, pasármelo bien, pero ellos se sentían tan mal, que tuve que animarles yo, en vez de ellos a mi.

La metedura de pata fue más mía, que de ellos. Si yo hubiera estado despierta cuando llegaron, ellos no hubieran tenido que darle charla a la cotilla de Maru, maru viene de Maruja fijo, y Maru no se habría enterado de la existencia de la nota. Ni una semana, ni una semana he pasado en Japón sin meter la gamba. Susi tenía razón, supongo que me conoce mejor que nadie, sabía que tardaría poco o nada a hacer de las mías. Yo quería que la excursión durará todo el día, llegar a casa fingir un dolor de barriga e irme a la cama. Pero en vez de eso, a las 3 ya estaba en casa, esperando que me cayera el chaparrón, o que me pusieran las maletas en la puerta o que se yo.

Bueno, he llegado y se ha hecho el silencio. Maru me ha mirado con la misma mirada que pone Susi cuando hago algo mal. Todos me han mirado como si hubiera apaleado a una ancianita y después la hubiera abierto en canal. Solo por una dichosa nota, por un día que no haces los deberes en Japón se monta la de Dios. Papá ha salido de la biblioteca y me ha preguntado ¿qué tal la excursión?, se ha extrañado que estuviera tan pronto en casa. Esperaba que en cualquier momento sacara un sable y me cortara en juliana. Pero se ha vuelto a meter en la biblioteca, como si nada. En ese momento instintivamente mi cuerpo se ha puesto a celebrarlo, “me he librado, je, me he librado je”. La alegría de la victoria a durado eso, el tiempo justo para decir “me he librado, je, me he librado je”, porque justo después del último je, ha sonado una voz de ultratumba en mi nuca, “que te lo crees, je, que te lo crees, je” en un español que ni el de Gala.

Efectivamente papá no es el único que habla español en casa de los Utada, y pensándolo bien, es lógico que un profe de literatura española enseñe español a sus hijos ¿no? Y si es tan lógico ¿porque no he caído hasta ahora?. Me he pasado toda la tarde en el despacho de Chechu y Hogai y él en un castellano perfecto me han dado una charla de 3 horas sobre la puñetera nota, y cuando ellos han acabado Ai en japonés también ha soltado la suya, tenía muchas ganas de llorar pero delante de extraños nunca lloro. Así que he aguantado todo una tarde de reproches por un simple descuido.  Cuando ya han acabado de darme la charla, Chechu me ha castigado. ¡Genial! desde que mamá murió nadie me había castigado. Susi es más de chillar y dar un bofetón, pero castigar rollo 2 semanas sin tele ni teléfono, o 1 mes sin salir o haciendo las tareas de casa o 2 semanas sin interné no. Pues los Utada son de castigos, y eso es lo que estoy castigada 2 semanas sin tele ni teléfono ni Internet, 1 mes sin salir y me toca hacer las tareas de casa hasta nueva orden. Y todo por una mísera nota. Y se supone que aun debo de agradecerles que no se lo hayan contado a papá. Me sabe mal molestar a papá pero peor va a ser estar 2 semanas sin hablar con Olga y los demás.  Creo que voy a bajar a hablar con papá, sé que no se va a enfadar, bueno quizás un poco, pero está tan contento que esté aquí, que no me dirá nada. Quizás alguna pollada japo sobre la decepción, pero ya me está bien, mañana le haré mimitos y se habrá olvidado. Pero no puedo pasarme 2 semanas sin hablar con Susi, Laurita, Olga, Mario,... 

La Nota 10/01/2003

10/10/2003

Me gustan los sábado, si todos los sábados son como hoy, yo firmo. Por la mañana me he levantado enfadada por lo de Chechu de ayer y por tener que ir al cole un sábado.  Me he tomado rápida el desayuno y he preparado 2 sándwiches, uno para mi y otro para Joe, le he tenido que dar explicaciones a Maru. Maru se ha comportado como Mari y Valeria, pero ella tiene 20 años más ¿no le da vergüenza?. En el trayecto hacia la escuela, he evitado cruzar la mirada con Chechu, se que le hubiera dicho algo muy gordo. Vale se lo he dicho, pero se lo he dicho en castellano, así que no hay problema. Cuando ha parado delante del cole, antes que yo saliera del coche, me ha pedido disculpas por lo de ayer, me ha dicho que estaba muy nervioso por una reunión que tenía hoy, pero que aquella no era excusa para su mal comportamiento. En ese momento me hubiera gustado que se hubiera hecho el harakiri allí mismo, delante de mí. Pero le he dicho un “no pasa nada, tranquilo” y le he sonreído. ¡Que asco!

Las clases de los sábados son solo hasta el medio día, y son todas en inglés, no hay japonés. Ni tan siquiera la hora obligatoria para los no-japoneses. Los profesores se ven más amables y aunque nos han puesto deberes, tenemos un día entero para hacerlos. Le he entregado la nota a Takeshi y él la ha entregado a  quien se la haya de entregar. Ni lo sé, ni me importa.  A Joe le ha gustado mi sándwich, no ha parado de repetírmelo, soy una gran cocinera, ¡claro! de la alta cocina de los bocatas, jejeje.

He ido a almorzar con chechu, se sentía culpable así que ha insistido en invitarme a comer. Hemos ido a comer a un italiano. Si, había cubiertos. ¡Bien! He pedido una pizza, un plato de macarrones y un helado de tiramisú.  Chechu se ha portado muy bien, me ha preguntado ¿cómo me iba el cole?, ¿si me gustaba Japón?, ¿si echaba de menos a Susi?.... No parecía él. Por lo visto, la reunión ha sido un éxito, su estado de ánimo era genial.

Al llegar a casa estaban todos, Hogai, Hiroani, Shoyo, Eichi, Ai, Maru y papá. Ha sido divertido ver como papá reñía a Tetsuzan como si fuera un crío de 6 años. Todos los padres son iguales, “¿y el teléfono para que está?, ¿no nos podías llamar?, sabes que los sábados comemos todos juntos ¿es que tú no tienes familia? Estábamos a punto de llamar a la policía”. Chechu ha bajado la cabeza y solo asentía y perdía perdón. Después de la reprimenda a Chechu. Ai y los chicos me han llevado a ver un dojo. Es el dojo donde van todos los de la familia, se ve que los dueños del dojo son amigos de la familia de toda la vida. Así que me han a dejado verlo, mientras hay clases y el dueño, Utamaro, (glutamato) me ha dicho que estará encantado que vaya siempre que quiera. Me ha enseñado una foto de mamá, Daisuke, Susi y él con la sagrada familia de fondo. Mama estaba guapísima y muy joven, tengo que pedirle que me haga una copia de la foto. Se la escanearé y se la enviaré a Susi. En esa foto se ve que Susi y Laurita son clavadas. Porque sé que es ella que sino hubiera dicho que es una foto de Laurita. Echo de menos a Laurita, a Luís y a Susi. Hasta marzo no los voy a ver, se me va a hacer largísimo.   

Hemos merendado en el dojo, bueno en la casa de Glutamato, nos ha invitado a pastelitos típico japoneses y a té. El té japonés, no me gusta, es muy amargo. Y los pastelitos japoneses, les faltan azúcar o nata o chocolate o cabello de ángel, o crema. Están buenos, pero no matan. Pero me han sabido a gloria, no sé, me lo he pasado muy bien. Glutamato y papá son muy amigos, y no paraba de picarse, además, Glutamato me ha dicho que si papá hubiera jugado limpio, yo ahora le llamaría papa a él, y no al cabeza pelada de Daisuke.

Cuando he llegado a casa me he puesto a hacer los deberes, no quiero más notitas. Los Utada  no les importa que les des esquinazo si estás haciendo los deberes, lo primero, es lo primero. Así que siempre que quiera darles esquinazo, nada, que con que decir que tengo muchos deberes ya está.  Esta noche acabaré de hacerlos, quiero tener el domingo totalmente libre.

Por cierto, Chechu me ha comprado unos palillos para niños pequeños, y se ha pasado toda la cena enseñándome, todos reían, parecíamos una familia feliz. Un par de días más y cree que me habré hecho con los palillos.

HOY HA SIDO EL MEJOR DÍA DESDE QUE LLEGUÉ A JAPÓN.

La Nota 09/01/2003

 

09/01/2003

Por fin es viernes, esto es lo que diría cualquier persona, hoy saldría de clase con una sonrisa y se prepararía para salir esta noche por ahí de fiesta con sus amigos. Cualquiera menos los japoneses, tenías que haberme visto la cara esta mañana cuando me he enterado que los sábados también se va al cole. Mi cara parecía un poema. Yo ya había hecho mis planes. Y para más INRI, como ayer me puse mala con el pastel no he podido hacer los deberes, así que tengo una preciosa nota informativa, que supongo que deberá de firmar Daisuke. Y con el jaleo que tuvieron ayer con Eichi, voy yo y ahora le tengo que traer la dichosa notita. Creo que la voy a firmar yo misma, creo que será lo mejor, así cada vez que me pidan la firma de Daisuke, como tendrán la mía de referencia, no tendré problemas.  No quiero molestarle con tonterías del colegio, ya se estoy siendo suficiente molestia para encima traerle más quebraderos de cabeza. Si lo repito varias veces al día, me lo acabaré creyendo. Son unos...no llevo ni una semana de clases y por un día que no he hecho los deberes ya se ponen histéricos. Sabes en España, quizás hayan calificaciones pero al menos sabemos darle la justa importancia a las cosas. Y si un día no haces los deberes, no se acaba el mundo. Hombre, no es que no haga los deberes nunca, es que ayer me encontraba mal y se me olvidaron.

El chico aquel que me dio el sándwich hoy traía 2, uno para mí y otro para él, lo hemos tomado juntos. Es muy simpático se llama Joe, su padre está en Tokio por 2 años en una cadena de televisión. Me ha dicho un par de programas que su papá produce, pero es que aun no me he hecho con la programación nipona. Joe no se ha separado de mí en todo el día, Valeria y Mari me han comenzado a comer la olla, que si Joe es muy guapo, que si es muy simpático, que si es muy amable conmigo... La verdad es que con la coña la comida de hoy ha sido más animada. Ha sido muy parecido a cuando comencé a hacer el tonto con Rubén, Olga , Paty y Cristina no paraba de hacer coña sobre lo simpático que era Rubén conmigo, lo atento que era, la cara de corderito que ponía cuando hablaba conmigo,... La verdad, es que si que ponía carita de cordero. Pero ahora no estoy por liarme con nadie y menos con un compañero de clase.

Cuando he llegado a casa, me he puesto a hacer los deberes, he pasado de cenar, mal hecho, porque me he mareado, afortunadamente, estaba en mi habitación y nadie me ha visto. He bajado a hurtadillas a la cocina, y he mangado un vaso de macedonia y un yogurt de medio kilo. Me lo he subido a la habitación y lo he devorado.  

Mi habitación da justo encima del despacho de Chechu, si, y cuando he puesto un poco de música porque ya estaba hasta el gorro de los deberes, y necesitaba esparcirme un poco, y me he puesto a bailar. Al cabo de un rato, ha entrado como un energúmeno en mi habitación, y me ha apagado el equipo de música, con muy malos modales.  Chechu es un gilipollas, me podía haber dicho que apagara la música, y yo la hubiera apagado. No hacía falta portarse como un energúmeno. Y debería saber que los insultos son lo primero que se aprenden de cualquier idioma, y aunque los digas entre dientes, se entienden muy bien.

La Nota 08/01/2003

08/01/2003

Hoy las clases han sido un tostón, nos han puesto muchísimos deberes. Estos japos trabajan como desquiciados, no me extraña que hay tantos suicidas entre los jóvenes. Si piensan ponernos tantos deberes cada día, van a acabar conmigo. Tengo un hambre, en clase de química me sonaban las tripas una barbaridad. Me sonaban tanto, que después en el cambio de clase un chico, creo que americano me ha ofrecido un sándwich. Realmente me ha salvado la vida, podía haberme desmayado mientras bajaba las escaleras y haberme roto el cuello. No espera que ahora soy una experta cayendo gracias al judo. A la hora de comer Valeria y Mari han estado hablando de ropa, ¿pero no se cansan? Pero me he enterado que cerca de mi casa hay un centro comercial que por lo visto está muy bien, este fin de semana no, pero el próximo iré con ellas de tiendas. Supongo que no será tan duro como cuando iba con Susi y nos pasábamos allí toda la tarde.

He sacado un 10 en español, lo sé, lo sé, no hay notas. Pero la profesora me ha dicho que soy la que ha hecho la mejor redacción. Y la guarra de Maria Jesús poniéndome aproadillos en lengua. Me gustaría que me viera ahora, soy la primera de clase. Hoy hemos jugado a una especie de pilla-pilla en judo, pero tenía tanta hambre, que me he dejado pillar a la primera y así he podido salir antes de clase. Hoy no ha habido de japonés, y he ido a tomar algo con Alicia, aun no había podido quedar con ella, ella no vive en Tokio sino en Yokohama, que está tan solo a 30 minutos de Tokio. Bueno, desde que mamá murió no la había vuelto a ver. Susi siempre dice que con Alicia no puedes contar pero me quedo más tranquila sabiendo que ella también está aquí. Lamento que no hayamos podido hablar mucho, porque Chechu tenía que recogerme a las seis, además Alicia ha sido siempre un poco rara.

Cuando he llegado a casa Maru estaba gritando a Eichi y Eichi estaba gritando a Maru, los 9 años son muy duros. Por lo visto la maestra de Eichi se ha quejado por su bajo rendimiento. Ey, mi japonés ha mejorado en un par de días, al menos por lo que respecta al vocabulario académico. Vale, que viviendo en casa de un profesor universitario y teniendo dos hermanos que aun estudian, pues, no tiene mérito. Pero me encanta porque he podido cotillear, mientras ellos pensaban que no me enteraba de nada. Eichi, con sus 9 años ya está hecho una auténtica lindeza. Seguro que es por culpa de los nabos.

He merendado pastel, que ha traído Ai, estaba bueno, me gustaría decir riquísimo, pero ni punto de comparación con los pasteles de Mamá. Creo que se me ha visto el plumero porque después de coger el tercer corte de pastel, Ai me ha dicho, que si meriendo tanto después no tendría hambre para cenar. Eso era precisamente lo que quería, porque hoy hay pescado y arroz para cenar, y el pescado aun, me lo puedo comer de un bocado, pero el arroz, estoy segura que va a acabar esparcido por todo el comedor. Pero no he podido comprobarlo, porque el pastel me ha sentado mal, así que me he acostado sin cenar, ahora me ha traído Maru una infusión y  me ha preparado un baño. Maru es muy buena, se que no le hace gracia que esté aquí, pero me trata muy amablemente. Cuando vaya al centro comercial, debo de comprarle algo bonito, es lo mínimo. Seguro que Susi estaría de acuerdo.

La Nota 07/01/2003

07/01/2003

Hoy me he levantado un pelín mareada, pero en cuanto he llenado la panza con los cereales con café y la manzana me he encontrado mejor. Eichi ha comenzado a hacer el cerdo con el desayuno, por lo visto no le gusta el nabo, y se ha llevado unos cuantos gritos. Así que entre el mareo y los gritos, he tenido un buen despertar. Para conseguir que el mocoso se callara le he dicho que me diera su nabo cuando Maru no mirara que yo me lo comería, y el chaval ha dejado de protestar. Pero cuando Eichi me estaba dando el nabo, papá ha entrado y le ha dado un pescozón a Eichi y a mi me ha dicho,”mal, mal, mal” moviendo la cabeza, como si yo fuera un perrito ¿o algo así?. Así que el mocoso berreaba y Maru me miraba como si yo fuera un monstruo. Para colmo, Chechu de camino al cole me ha dejado caer algo sobre la responsabilidad y la influencia, bla bla bla. Afortunadamente, me ha dado la charla en inglés, así que he desconectado y he disfrutado del paisaje. Pero lo tengo claro, la próxima vez que Eichi no le guste el desayuno, por mi como si vomita encima de la mesa, no pienso echarle un capote, ni de coña.

Al llegar a clase, estaba desanimada así que me disponía a sentarme muy recta mover la cabeza asintiendo cada vez que me mirara el profesor y pasar un día tranquilito. Pero a la entrada me han abordado un par de chicos Takeshi y Amane, que son del no sé que de estudiantes, que querían ayudarme a integrarme en el instituto y en el país. Bueno que por lo visto, tengo una cita con los dos mozos el domingo. Jejeje, estoy hecha una matahari. Bromas a parte, a todos los extranjeros que hemos entrado este año, se nos han asignado un par de estudiantes mayores para que nos ayuden si tenemos algún problema. Mis ángeles de la guarda se llaman Takeshi y Amane, me han dado sus teléfonos y sus dirección, ya tengo dos teléfonos en el móbil, bueno a parte de los de la familia.

Pues después del primer contacto con mi comité de bienvenida, las clases han pasado rápidas. Y a la hora del almuerzo he comido con Valeria y Mari las 2 chicas argentinas. Son muy petardas, se han pasado la hora de la comida hablando de ropa. Cuanto echo de menos a Olga, Paty, Mario y los otros. Esta tarde me he conectado a ver si los encontraba, por ahora solo había podido hablar con Olga y Susi, ¡mierda de cambio horario! Y he podido hablar con Paty, me ha dicho que ha empezado a trabajar en un supermercado, para poder ahorrar y venir este verano a hacerme una visita. Seré tonta, me he puesto a llorar como una magdalena.

A la tarde, he llegado tarde a cocina, le he dicho a la profesora que me había perdido, se ha reído y me ha dicho flojito, que a ella le pasa muy a menudo. Bueno ya tengo una excusa para llegar tarde a Cocina. En judo he continuado cayendo, que creo que si lo hacen modalidad olímpica me voy a llevar la medalla de oro. Y para acabar Español, hoy hemos practicado las presentaciones, y la familia. La profesora me ha felicitado por mi buena pronunciación, namás faltaba, pero por lo visto la tía no se ha coscado que no soy americana sino española. Vaya mierda profesora de español, y creo que por eso mismo va a ser mi profe favorita este curso.

Cuando he llegado a casa he pasado de merendar, paso de la cara larga de Maru y de papá, así que me he metido en el despacho de Chechu a navegar un rato. Pero cuando a llegado Chechu, me he tenido que ir, tenía que acabar unas cosas del curro. Así que, me he puesto a ver la tele con Eichi, es muy divertida la tele japonesa, está llena de freaks, es genial, voy a grabar un par de cintas y se las enviaré a Olga. Nos estábamos riendo tanto, que ha tenido que salir Chechu a llamarnos la atención. Pobre Chechu le invado el estudio y encima no le dejo trabajar. Pero Shoyo lo imita muy bien, es muy gracioso, Shoyo es un payaso y muy bueno haciendo imitaciones. Estoy segura que a Susi le gustaría Shoyo. Shoyo me ha puesto un nombre nipón, Himeko, y yo le he puesto uno español a partir de ahora Shoyo se llama Lolo, como el hermano de Paty. Me lo recuerda un poco. A la hora de cenar había sopa, me encanta la sopa, la sopa no se come con palillos, he repetido 2 veces. Lolo me quería ceder la suya, pero para entonces yo ya me había desabrochado el botón de los pantalones y comenzaba a resoplar. Toman la sopa muy caliente, así que le echo cubitos de hielo y hacen un gracia cric cric crac, que ha Eichi y a mi nos ha entusiasmado. Maru no le ha hecho gracia que le echara hielo, pero cuando he repetido le ha parecido bien y me ha sonreído, creo que ya me ha perdonado por lo de esta mañana.