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La Nota

La Nota 07/01/2003

07/01/2003

Hoy me he levantado un pelín mareada, pero en cuanto he llenado la panza con los cereales con café y la manzana me he encontrado mejor. Eichi ha comenzado a hacer el cerdo con el desayuno, por lo visto no le gusta el nabo, y se ha llevado unos cuantos gritos. Así que entre el mareo y los gritos, he tenido un buen despertar. Para conseguir que el mocoso se callara le he dicho que me diera su nabo cuando Maru no mirara que yo me lo comería, y el chaval ha dejado de protestar. Pero cuando Eichi me estaba dando el nabo, papá ha entrado y le ha dado un pescozón a Eichi y a mi me ha dicho,”mal, mal, mal” moviendo la cabeza, como si yo fuera un perrito ¿o algo así?. Así que el mocoso berreaba y Maru me miraba como si yo fuera un monstruo. Para colmo, Chechu de camino al cole me ha dejado caer algo sobre la responsabilidad y la influencia, bla bla bla. Afortunadamente, me ha dado la charla en inglés, así que he desconectado y he disfrutado del paisaje. Pero lo tengo claro, la próxima vez que Eichi no le guste el desayuno, por mi como si vomita encima de la mesa, no pienso echarle un capote, ni de coña.

Al llegar a clase, estaba desanimada así que me disponía a sentarme muy recta mover la cabeza asintiendo cada vez que me mirara el profesor y pasar un día tranquilito. Pero a la entrada me han abordado un par de chicos Takeshi y Amane, que son del no sé que de estudiantes, que querían ayudarme a integrarme en el instituto y en el país. Bueno que por lo visto, tengo una cita con los dos mozos el domingo. Jejeje, estoy hecha una matahari. Bromas a parte, a todos los extranjeros que hemos entrado este año, se nos han asignado un par de estudiantes mayores para que nos ayuden si tenemos algún problema. Mis ángeles de la guarda se llaman Takeshi y Amane, me han dado sus teléfonos y sus dirección, ya tengo dos teléfonos en el móbil, bueno a parte de los de la familia.

Pues después del primer contacto con mi comité de bienvenida, las clases han pasado rápidas. Y a la hora del almuerzo he comido con Valeria y Mari las 2 chicas argentinas. Son muy petardas, se han pasado la hora de la comida hablando de ropa. Cuanto echo de menos a Olga, Paty, Mario y los otros. Esta tarde me he conectado a ver si los encontraba, por ahora solo había podido hablar con Olga y Susi, ¡mierda de cambio horario! Y he podido hablar con Paty, me ha dicho que ha empezado a trabajar en un supermercado, para poder ahorrar y venir este verano a hacerme una visita. Seré tonta, me he puesto a llorar como una magdalena.

A la tarde, he llegado tarde a cocina, le he dicho a la profesora que me había perdido, se ha reído y me ha dicho flojito, que a ella le pasa muy a menudo. Bueno ya tengo una excusa para llegar tarde a Cocina. En judo he continuado cayendo, que creo que si lo hacen modalidad olímpica me voy a llevar la medalla de oro. Y para acabar Español, hoy hemos practicado las presentaciones, y la familia. La profesora me ha felicitado por mi buena pronunciación, namás faltaba, pero por lo visto la tía no se ha coscado que no soy americana sino española. Vaya mierda profesora de español, y creo que por eso mismo va a ser mi profe favorita este curso.

Cuando he llegado a casa he pasado de merendar, paso de la cara larga de Maru y de papá, así que me he metido en el despacho de Chechu a navegar un rato. Pero cuando a llegado Chechu, me he tenido que ir, tenía que acabar unas cosas del curro. Así que, me he puesto a ver la tele con Eichi, es muy divertida la tele japonesa, está llena de freaks, es genial, voy a grabar un par de cintas y se las enviaré a Olga. Nos estábamos riendo tanto, que ha tenido que salir Chechu a llamarnos la atención. Pobre Chechu le invado el estudio y encima no le dejo trabajar. Pero Shoyo lo imita muy bien, es muy gracioso, Shoyo es un payaso y muy bueno haciendo imitaciones. Estoy segura que a Susi le gustaría Shoyo. Shoyo me ha puesto un nombre nipón, Himeko, y yo le he puesto uno español a partir de ahora Shoyo se llama Lolo, como el hermano de Paty. Me lo recuerda un poco. A la hora de cenar había sopa, me encanta la sopa, la sopa no se come con palillos, he repetido 2 veces. Lolo me quería ceder la suya, pero para entonces yo ya me había desabrochado el botón de los pantalones y comenzaba a resoplar. Toman la sopa muy caliente, así que le echo cubitos de hielo y hacen un gracia cric cric crac, que ha Eichi y a mi nos ha entusiasmado. Maru no le ha hecho gracia que le echara hielo, pero cuando he repetido le ha parecido bien y me ha sonreído, creo que ya me ha perdonado por lo de esta mañana.

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